SOLUCIONARIO EXAMEN DE 1ª EVALUACIÓN. 2ºBC
CUESTIONES:
1. Conquista y Romanización: la
pervivencia del legado cultural romano en la cultura Hispánica:
La conquista de la Península Ibérica por Roma se inició con
la Segunda Guerra Púnica
(219-201 a.C.)- siguió la campaña de Catón en 195 a.C. para
reprimir las sublevaciones indígenas, las guerras contra los lusitanos
(Viriato), la conquista de Numancia en 134 a.C. (centro y oeste) y finalizó con
las guerras cántabro-astures dirigidas por Augusto y que finalizaron en el año
19 a. C. (norte).
La romanización: es . ..
Los principales focos de romanización fueron las ciudades;
sus principales difusores los soldados y los comerciantes y sus hechos más
destacados :
La legua latina:. Aparece así el denominado latín
vulgar, del que derivan las lenguas romances (castellano, francés, italiano…).
En España nacieron filósofos y literatos como Séneca, Lucano y Quintiliano,
cuyo idioma era el latín.
El derecho romano:
La religión de Roma: incluido el culto al emperador. A
pesar de ello, las creencias autóctonas no desaparecieron. Así mismo llegaron a
España religiones como el cristianismo y otras del Mediterráneo oriental, como
el culto a Mitra o a Isis.
La
cultura romana tuvo un carácter
eminentemente práctico y por
ello fueron grandes ingenieros
y grandes constructores de obras públicas. En la península podemos destacar los
siguientes ejemplos:
·
Múltiples puentes como el de Alcántara o Mérida.
Además
de estas obras públicas, Roma dejó importantes obras artísticas de utilidad
pública como:
La
dominación de Roma dejó en Hispania una tupida red
urbana (Tarraco,
Cesar Augusta, Emerita, Toletum…) ligada por un complejo
sistema de calzadas y
otras infraestructuras públicas. Las construcciones monumentales: templos como
el de Diana, en Mérida; foros y teatros como los de Mérida y Sagunto;
anfiteatros como los de Itálica y Tarragona; puentes como el de Alcántara sobre
el río Tajo o el de Mérida sobre el Guadiana; pantanos como el de Proserpina,
en Mérida, y acueductos como los de Segovia y Mérida. Las calzadas: red de
caminos empedrados, construidos por el ejército, que comunicaban las ciudades y
por los que transitaban mercancías, viajeros y tropas. Las rutas principales
eran la Vía August, con ciudades importantes como Tarragona, Cartagena, Sevilla
y Cádiz, y la Vía de la Plata, donde se encontraban Astorga, Cáparra y Mérida, entre otras
ciudades.
2. La organización económica y social
de Al-Andalus.
La Economía
La España musulmana supuso importantes cambios en el terreno
económico.
En la agricultura: regadío, con novedades tan significativas
como la noria, al tiempo que difundieron cultivos como los cítricos, el arroz,
el algodón o el azafrán. No obstante, los cultivos principales de las tierras
hispanas siguieron siendo los mismos que en la época romano-visigoda: los
cereales, la vid y el olivo.
En la ganadería,
el descenso de la cabaña porcina por la prohibición coránica, se compensó con
el desarrollo del ganado ovino o equino. La apicultura vivió un desarrollo
espectacular.
En la minería
sobresalió la extracción de plomo, cobre, cinabrio y oro, que se obtenía del
lavado de diversos cursos fluviales.
La producción de manufacturas se desarrolló fuertemente,
en especial la producción textil, en la que destacaron los brocados
cordobeses o los tejidos de Zaragoza. La
cerámica, las armas, la fabricación de papel y de vidrio, y el trabajo de las
pieles y los metales preciosos tuvieron presencia en las ciudades de
Al-Andalus.
En cuanto al comercio,
actividad muy elogiada en los propios textos coránicos, se vio favorecido por
la acuñación de dos tipos de monedas, el dinar de oro y el dirhem de
plata, y por la densa red viaria heredada de tiempos romanos. El comercio
interior se efectuaba en el zoco de las ciudades, donde ocupaban un
puesto privilegiado los bazares, centros en los que se vendían productos de
gran calidad. En los zocos también había
alhóndigas, centros que servían para almacenar mercancías, así como para
alojar a los comerciantes que venían de fuera.
Al-Ándalus mantuvo también un intenso comercio exterior, tanto con los restantes países
islámicos como con la Europa cristiana. Exportaba, ante todo, productos
agrícolas (aceite, azúcar, higos, uvas), minerales y tejidos, e importaba
especias y productos de lujo del Próximo Oriente; pieles, metales, armas y esclavos de la
Europa cristiana; y oro y esclavos negros procedentes del territorio africano
de Sudán.
La Sociedad:
Aunque la mayor parte de la población de Al-Andalus vivía en
el medio rural, las ciudades tuvieron una gran importancia, algo que
contrastaba fuertemente con el panorama de la España cristiana durante los
siglos VIII al XI.
Las ciudades andalusíes se desarrollaron en su gran mayoría
a partir de las existentes en los tiempos romano-visigodos. Pero los musulmanes
también crearon ciudades nuevas, como Almería, Madrid o Calatayud. Córdoba, que
en la época califal, llegó a contar con más de 100.000 habitantes, cantidad muy
considerable en aquella época.
En la cúspide de la
sociedad andalusí estaba la aristocracia (jassa), en su mayor parte
integrados por familias de origen árabe, aunque también figuraban en ella
algunos linajes de ascendencia visigoda. Este grupo social poseía grandes
dominios territoriales y la ocupaba los altos puestos en la administración. En
el otro extremo de la sociedad se hallaban las
clases populares (amma), formadas por artesanos modestos
y labriegos, en su mayor parte bereberes del Norte de África y muladíes.
También existió lo que podríamos denominar una clase media,
formada esencialmente por los mercaderes.
En Al-Andalus había esclavos
procedentes de Europa oriental y del centro de
África. Hay que destacar, por último, la evidente situación
de inferioridad que padecían las mujeres en con respecto a los hombres.
Los hispanovisigodos se dividían en muladíes
(los más numerosos) que eran cristianos convertidos al Islam (y así no pagaban
el dimni o tributo) y mozárabes, cristianos muy
arabizados(empeoran sus condiciones cuando llegan los imperios norteafricanos a
Al-Andalus). También había judíos, generalmente en las ciudades
con oficios especializados (médicos, prestamistas, etc.). Había esclavos.
Inferioridad de la mujer.
3. Diversidad cultural: Cristianos,
musulmanes y judíos.
Durante la Edad
Media, a la vez que la guerra y el enfrentamiento, tuvo lugar la coexistencia y
la fusión entre las tres culturas y religiones presentes en la península: la
cristiana, la musulmana y la judía.
Hasta el siglo X, la España islámica fue culturalmente muy
superior a los reinos cristianos. Sólo los monasterios, como el de Ripoll o
Sahagún, preservaron y trasmitieron la cultura mediante la copia y conservación
de libros.
En el siglo IX tuvo lugar un hecho clave: el descubrimiento
de los restos del apóstol Santiago. Nació así la Ruta Jacobea de peregrinación.
El Camino
de Santiago se
convirtió en una ruta clave en la difusión cultural. Llegaron modelos literarios,
como los cantares de gesta, y estilos artísticos, como el románico y el gótico.
La influencia cultural también tuvo lugar en sentido contrario y las
aportaciones culturales de los reinos cristianos hispanos y la influencia de la
cultura hispanomusulmana llegaron al resto de Europa.
A partir del siglo XI se inicia un fuerte desarrollo
cultural paralelo a la formación de las lenguas romances: castellano (Cantar del Mio Cid, 1207), gallego,
portugués, catalán-valenciano. En el s. XIII aparecieron las Universidades (Salamanca, 1218).
El puente cultural entre mundo islámico y cristiandad fue la
prestigiosa Escuela de Traductores de Toledo que alcanzó su apogeo
con Alfonso X el Sabio (s. XIII).
Allí colaboraron cristianos, musulmanes y judíos que traducían del árabe al
latín y, luego, directamente al castellano. La Escuela fue muy importante en la
difusión en la península y europea de las obras científicas, filosóficas y
literarias de griegos, romanos y orientales.
4. Crisis demográfica, económica y
social en la Baja Edad Media.
Los siglos XIV y XV
estuvieron marcados por una profunda crisis demográfica, económica y política. En Castilla la crisis tuvo su apogeo
en el siglo XIV, mientras que en Aragón y Cataluña el momento peor fue el siglo
XV.Crisis demográfica
Las malas cosechas se repitieron a lo largo de estos siglos. Las técnicas agrícolas no habían evolucionado lo suficiente para evitar los estragos causados por la mala climatología.
El ciclo se repitió varias veces: malas cosechas, escasez de alimentos, carestía, hambre. En esas circunstancias de desnutrición, la población era fácilmente atacada por las epidemias. La Peste Negra 1348-1851 fue la más brutal, pero no la única. Se estima que en algunas zonas la población descendió entre el 20 y el 40%.
Crisis económica
Crisis demográfica golpeó duramente a una agricultura que no había evolucionado tecnológicamente. Amplias zonas se despoblaron, reduciéndose las tierras puestas en cultivo a la vez que, en muchas zonas, escaseaba la mano de obra campesina. El descenso de las rentas de los grandes propietarios, la nobleza, fue la lógica consecuencia de esta situación.
Esta nueva situación (falta de mano de obra, zonas despobladas y tierras no cultivadas que podían ser utilizadas para pastos) llevó a que en Castilla la ganadería trashumante ovina se impusiera como principal actividad económica. Los privilegios del Honrado Concejo de la Mesta, asociación de los grandes ganaderos castellanos fundada por Alfonso X el Sabio en el 1273, aumentaron notablemente.
La artesanía también entre en declive ante el descenso de la demanda provocado por el descenso demográfico y el empobrecimiento de la población.
El comercio fue la actividad menos afectada por la crisis:
El comercio castellano continuó creciendo. Basado en la exportación de lana y la importación de productos manufacturados de lujo y dirigido esencialmente a Flandes..
El comercio catalán en el Mediterráneo , se basó en la exportación de productos textiles y la importación de sedas y especias, se mantuvo en el siglo XIV, aunque decayó en el XV.
En estos siglos hubo importantes avances comerciales: ferias (Medina del Campo), consulados (catalanes por todo el mediterráneo), técnicas bancarias (letra de cambio, sociedades mercantiles)
Crisis social
La disminución de ingresos de la nobleza llevó a que los grupos sociales dominantes intensificaran la explotación del campesinado estableciendo nuevos y más duros derechos señoriales.
La reacción campesina llevó a diversos levantamientos en el siglo XV:
·
Payeses de remensa en Cataluña. Este conflicto concluyó con Sentencia arbitral de Guadalupe de 1486 adoptada por Fernando el
Católico. La sentencia puso fin a la última reminiscencia de la servidumbre
medieval en España.
El malestar social dio lugar
a otros tipos de conflicto. Conflictos
sociales urbanos, como el que enfrentó a la Biga, alta burguesía, y la Busca, clases populares, en la
Barcelona del siglo XV. Rebrote del antisemitismo que llevó a múltiples pogromos
contras las comunidades judías en el siglo XIV y XV . Como resultado de
esta violencia, muchos judíos se convirtieron al cristianismo. Serán los conversos o cristianos
nuevos.Crisis política
La crisis generalizada tuvo también su expresión política. El foco de conflicto principal fue la pugna entre los monarcas y los grupos privilegiados, nobleza y clero, por la hegemonía política.
En Castilla hubo varios conflictos de gran gravedad:
·
La guerra civil entre Pedro I y Enrique de Trastámara a fines del siglo XIV trajo al trono a
una nueva dinastía, los Trastámara, y significó el triunfo coyuntural de la
nobleza
·
Los
reinados de Juan II y Enrique IV en el siglo XV se caracterizaron
por múltiples conflictos. A Enrique IV le sucedió su hermana Isabel de Castilla.
En Aragón estalló la guerra civil al
enfrentarse el rey Juan II con la nobleza y el clero catalanes
(1462-1472). La confluencia de esta guerra civil con los conflictos de los remensa en el campo y el de la Busca y la Biga en Barcelona dejaron al principado de
Cataluña destrozado. A Juan II le sucedió Fernando de Aragón.
5. Unión Dinástica: Integración de
las Coronas de Castilla y de Aragón.
En 1469 tuvo lugar el matrimonio de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón. Ambos pertenecían a
las familias reinantes en Castilla y Aragón. donde reinaban diferentes ramas
de la dinastía Trastámara.
Tras morir Enrique IV estalló la guerra civil en Castilla. La hermana, Isabel de Castilla, que contaba
con el apoyo de Aragón, y la presunta hija, Juana "la Beltraneja", apoyada por
Portugal, se enfrentaron en un conflicto que culminó con la batalla de Toro en
1476 y la paz de Alcaçovas con Portugal en 1479. Isabel I era reconocida como reina de
Castilla.
Ese mismo año de 1479,
Fernando I era coronado rey de Aragón. Culminaba la unión dinástica entre
los dos reinos más poderosos de la península. Los nuevos reyes se aprestaron a
conseguir la unión peninsular bajo su corona.
En enero de
1492 culminó la conquista del reino nazarí de Granada. Acababa así la
Reconquista y la presencia musulmana en la península.
Con Portugal, las ya conocidos como Reyes Católicos, intentaron
infructuosamente la unión matrimonial.
Finalmente, tras morir Isabel, Fernando el Católico
conquistó Navarra en
1512. En 1515se
declaró la unidad de Navarra a Castilla.
Anteriormente, con la firma del tratado de Barcelona en 1493, Aragón había recuperado
de Francia los territorios ultrapirenaicos del Rosellón y la Cerdaña,
y, Castilla había concluido en 1496 la conquista de Canarias.
Había concluido el proceso de unificación de España. La
unión era, sin embargo, una unión dinástica. Bajo los mismos
monarcas, los distintos reinos siguieron manteniendo diferentes leyes e
instituciones.
6. El descubrimiento de América.
El
descubrimiento de América en 1492 por Cristóbal Colón fue uno de los hechos más
importantes de la historia europea y condicionó la evolución política, social y
económica de los siglos siguientes.
Es posible
que durante la Edad Media llegasen algunas expediciones
nórdicas a la costa de
Norteamérica, pero, ya desde comienzos del siglo XV, portugueses y castellanos
habían iniciado un intento de llegar a Oriente (las Indias), proveedor de
especias y de productos de gran valor, mediante un camino alternativo a las
rutas tradicionales del Mediterráneo oriental.
Las
crecientes dificultades del Imperio Bizantino, que finalmente caería con la
toma por los turcos de
Constantinopla en 1453, forzaron a los europeos occidentales a buscar rutas
alternativas a Asia.
Fruto de
estas expediciones fue la conquista castellana de las islas Canarias, que comenzó en
1402 por la isla de Lanzarote y concluyó en 1496 con la conquista de Tenerife.
A finales
del siglo XV parecía claro que los portugueses se habían adelantado a los castellanos
en la conquista de la ruta de las especias y de los metales preciosos, gracias
al dominio que ya ejercían sobre la costa
occidental africana. En este momento, Cristóbal
Colón, que había estado a las órdenes del rey de Portugal, ofreció a los Reyes Católicos el proyecto de llegar a las Indias
siguiendo una ruta hacia el
oeste en lugar de bordeando todo el continente africano. Para poner en
práctica su proyecto, Colón partía de la idea de la esfericidad de la Tierra,
cuestión controvertida en la época. Finalmente, por las Capitulaciones de Santa Fe, los Reyes
Católicos acordaron con Colón el inicio de la expedición.
El 3 de agosto de 1492 Colón inició su viaje saliendo del puerto de Palos de la Frontera en Huelva. La expedición de tres naves llegó a una pequeña isla de las Antillas el 12 de octubre.
El 3 de agosto de 1492 Colón inició su viaje saliendo del puerto de Palos de la Frontera en Huelva. La expedición de tres naves llegó a una pequeña isla de las Antillas el 12 de octubre.
Durante
mucho tiempo Colón siguió creyendo que había llegado a Asia por la ruta
occidental, pero en realidad se había encontrado con la existencia de un
continente desconocido en Europa: América.
La partición de las zonas de expansión y navegación entre Castilla y Portugal se acordó por el Tratado de Tordesillas (1494). Un meridiano situado a 370 leguas de Cabo Verde separó las dos zonas de influencia: la occidental para Castilla y la oriental para Portugal. De esta manera la costa africana y el actual Brasil quedaron en manos portuguesas, y el resto de América en manos castellanas.
La partición de las zonas de expansión y navegación entre Castilla y Portugal se acordó por el Tratado de Tordesillas (1494). Un meridiano situado a 370 leguas de Cabo Verde separó las dos zonas de influencia: la occidental para Castilla y la oriental para Portugal. De esta manera la costa africana y el actual Brasil quedaron en manos portuguesas, y el resto de América en manos castellanas.
TEMA: EL IMPERIO DE CARLOS V.
Conflictos internos: Comunidades y Germanías:
Al morir su abuelo materno, Fernando, en 1516, Carlos de
Habsburgo, que ya había heredado los territorios de Borgoña de su
abuela paterna, se hizo coronar Rey de Castilla y Aragón e inició viaje a la
península. El nuevo monarca no conocía el castellano y vino acompañado de consejeros flamencos que ocuparon los más
importantes puestos en la Corte y la Iglesia.
Una vez coronado, Carlos I convocó Cortes para que votaran nuevos impuestos. La reacción fue
inmediata en Castilla, las protestas le recordaban al rey su obligación de
residir en el reino y de respetar las leyes del reino. Similares protestas
surgirán en Aragón ante la demanda de nuevos impuestos.
Las
Comunidades de Castilla
Descontento creciente devino en la sublevación de las Comunidades de Castilla, o
de los Comuneros. La
mayor parte de las ciudades de la zona central del reino (Segovia, Toledo,
Salamanca…) se revelaron contra la autoridad del monarca.
Las causas de la rebelión son complejas:
·
Aristocracia castellana veía como una
humillación que el rey hubiera entregado la administración del reino a
consejeros flamencos y hubiera dejado a Adriano de Utrecht como gobernador del
reino en su ausencia.
·
Carlos había empleado el dinero de los nuevos
impuestos en conseguir la elección como Emperador alemán
·
Carlos había desdeñado el requerimiento de que
aprendiera castellano y respetara las leyes del reino
·
La burguesía urbana temía que se volviera a la
tradicional política de exportar la lana en bruto a Flandes lo que iría en
detrimento de la artesanía textil castellana
Al salir Carlos de Castilla, la revuelta
estalló en Toledo y pronto se extendió a otras ciudades. Las autoridades reales
fueron depuestas y sustituidas por nuevos regidores comuneros.
Tras el incendio de Medina del Campo por las
tropas del rey, la insurrección se generalizó
Los Comuneros crearon la Santa Junta en Tordesillas,
gobierno rebelde, que exigió la retirada de los impuestos (servicios) aprobados
en Cortes, el respeto a las leyes del reino y la marcha de los consejeros
flamencos.
Los Comuneros intentaron sin éxito convencer a
doña Juana, recluida en un castillo de Tordesillas, a que se pusiera al frente
de la rebelión y apoyara a las Comunidades.
La rebelión propició el desorden social y hubo
rebeliones antiseñoriales en algunas zonas. La nobleza empezó a alejarse de los
comuneros.
Las disensiones internas y la radicalización
antiseñorial del movimiento debilitó a los Comunidades. Tras la derrota de las
tropas comuneras en Villalar en 1521, todas las ciudades
abandonaron el movimiento, excepto Toledo que fue finalmente dominado en 1522.
Los dirigentes comuneros Padilla, Bravo y
Maldonado fueron
ejecutados. La derrota comunera significa el inicio del absolutismo en Castilla
y el reforzamiento del poder del rey.
Las
Germanías
Las causas del movimiento las encontramos en la crisis económica y las
epidemias que se abatieron sobre el reino de Valencia, a lo que se vino a unir
el descontento social en entre los artesanos y los pequeños comerciantes
enfrentados con la oligarquía urbana (grandes comerciantes) y la nobleza.
La rebelión de las clases populares, la
Germanía, se inició en la ciudad de Valencia en 1520 aprovechando que la
nobleza había huido de la ciudad por la peste. Pronto la revuelta se
extendió hacia el sur del reino.
Los agermanats también atacaron a los
moriscos, a los que, además del odio religioso, acusaban de ser sumisos a la
nobleza y a la Corona.
Aunque Carlos V reaccionó lentamente, Valencia
no era tan importante como Castilla para el poder en sus reinos, finalmente
ordenó al Virrey que reprimiera el conflicto. El conflicto degeneró en un
enfrentamiento directo entre agermanats y la nobleza valenciana. Finalmente la
rebelión fue reprimida en 1522.
Hubo otra Germanía en Baleares que fue fácilmente
sofocada.
COMENTARIO DE TEXTO:
1.
Resumen:
-Orígenes de
la Inquisición.
-Causas de
la aparición de la Inquisición en Castilla: el problema de los judíos
conversos.
-La
fundación de la Inquisición en Castilla: la bula papal de Sixto IV, Mendoza, Torquemada
y el funcionamiento en Andalucía.
2. Ideas
fundamentales:
-La
Inquisición medieval.
-El problema
de los conversos.
-La bula de
autorización.
-Influencia
de la Corona en la Inquisición y el problema con los Obispos.
-La
influencia de Mendoza y Torquemada.
-El comienzo
de la Inquisición en Castilla y sus consecuencias.
3. La
organización del estado: Instituciones de gobierno:
Con los Reyes Católicos protagonizaron una gran labor de fortalecimiento del poder de
los monarcas. La tarea, iniciada durante los años de la guerra civil en
Castilla, continuó a lo largo de todo su reinado. Isabel y Fernando pusieron
fin al conflicto entre poder nobiliar y poder real que había caracterizado a la
Baja Edad Media. Con los Reyes Católicos la autoridad de los monarcas fue
restaurada y se consolidaron las instituciones de gobierno y la hacienda
pública.
La reorganización
del sistema de Hacienda fue
una primera y necesaria medida de los monarcas. Adoptada en las Cortes de
Toledo de 1480, se revisaron las mercedes
(concesiones a los nobles) efectuadas durante el reinado de Enrique IV.
Esta medida, que perjudicó esencialmente a los nobles que habían apoyado a
Juana "la Beltraneja", permitieron a los monarcas rescatar más de la
mitad de sus rentas
En 1476, en las Cortes reunidas en Madrigal de las Altas Torres,
se aprobó la constitución de la Santa
Hermandad. Organismo policial y judicial, que ejercía también una
importante labor en la recaudación de impuestos. La Santa Hermandad fue clave
en la restauración de la paz y el orden en el reino.
En 1480 se reorganizó el Consejo
Real, dando el papel central a los letrados, salidos de las Universidades con
sólida formación jurídica. Los nobles quedaron relegados a un papel meramente
consultivo.
El poder real también se reforzó en el ámbito local con la
generalización de los corregidores. Delegados del poder de los monarcas
en villas y ciudades, presidían los ayuntamientos y tenían funciones judiciales
y policiales.
Otras medidas importantes fueron el control real de las Órdenes Militares (Santiago, Calatrava, Alcántara) y el
fortalecimiento de la administración de la justicia, con dos Reales
Chancillerías, sitas en Valladolid y Granada.
En la Corona de Aragón, debido a su tradición política "pactista" el
poder monárquico tuvo muchas más dificultades en fortalecerse. No obstante, el
poder de los lugartenientes generales, importantes por la frecuentes ausencias de Fernando I, fueron reforzados.
ALGUNAS COSAS QUE CENTRAN
MÁS ESTOS CONTENIDOS:
La
ampliación de territorios fue acompañada desde el primer momento por una
organización de las instituciones de gobierno que iban afianzando el estado
autoritario y que significaba en buena medida la culminación del proceso de
autoritarismo iniciado por Alfonso XI en la primera mitad del siglo XIV.
Las instituciones de gobierno continuaban, es decir, se mantenían
las instituciones existentes al subir al trono los monarcas, que en algunas
introducían modificaciones. Consejo Real, Audiencia Chancillería eran las tres
más importantes, perdiendo fuerza las Cortes a favor del Consejo Real. Las
modificaciones consistieron en ocasiones en pasar responsabilidades de unas
instituciones a otras. Por ejemplo, la resolución de ciertas disputas legales
se pasó del Consejo a la Chancillería. Se crearon dos chancillerías una en
Valladolid y otra en Ciudad Real (después trasladada a Granada).
Junto a estas instituciones del poder central, los reyes
introdujeron o modificaron otras instituciones que les ayudaran a controlar a
sus súbditos. Entre esas instituciones hay que incluir las relacionadas con el poder
municipal, el poder religioso y el poder de policía.
Poder municipal. En lo referente al poder municipal, los Reyes Católicos
consolidaron un oficial que les representara en los gobiernos locales, el
corregidor. Este oficial existía con anterioridad y se había
instaurado en ciudades o villas en los que había problemas de difícil solución
por los oficiales municipales. Ese funcionario esporádico, enviado por los
reyes con intención de poner paz en tiempo turbulentos, se convirtió en un
oficial regular, que permitía a los reyes entrometerse en la política local.
Poder religioso. En lo referente a la política religiosa, la gran institución
introducida en Castilla por los Reyes Católicos, fue el tribunal de la Santa
Inquisición desde
1478. En Aragón había venido actuando la Inquisición pontificia iniciada en el
siglo XIII, pero los reyes castellanos no la habían aceptado. Los Reyes
Católicos, en su proceso de unificación y purificación del catolicismo,
instauraron la Inquisición con un sentido diferente al que había tenido la
pontificia. Si ésta se dedicaba a castigar herejes, la nueva Inquisición se
ocupaba de los falsos conversos. Los judíos o musulmanes que practicaban
abiertamente su religión no eran perseguidos, lo eran aquellos que habiéndose
hecho cristianos seguían practicando su religión en secreto (criptojudíos).
Poder de la policía. La política encaminada a poner orden en el reino llevó a los reyes
a crear la Santa Hermandad, que nacida para
luchar contra la delincuencia que asolaba Castilla durante la guerra entre
Isabel y Juana, se convirtió en un ejército real privado, pagado por las
ciudades, que en ocasiones protestaban de los altos costos que suponía. La
iniciativa partió de las ciudades que propusieron crear hermandades en cada
ciudad o villa, y su unión en una hermandad general. El objetivo inicial fue
perseguir y acabar con los asaltos de caminos, con los robos y homicidios.
Siguió cumpliendo su misión de pacificación interna, pero los reyes la
utilizaron, como un auténtico ejército, para la persecución de disidentes
políticos, en la conquista de Canarias y en la de Granada.
FUENTE HISTÓRICA:
Debemos hablar de las ideas siguientes:
- Puertos
implicados en ese comercio y centros económicos importantes señalados en el
mapa.
- El
monopolio sevillano y la Casa de Contratación.
- El Sistema
de Flotas.
- Productos intercambiados
entre ambas partes del océano Atlántico.
- La
“Revolución de los Precios”.
SOLUCIONARIO EXAMEN DE 1ª EVALUACIÓN. 2ºBB
1. Pueblos prerromanos.
Colonizaciones históricas: Fenicios, griegos y cartagineses.
Los pueblos que habitaban la Península antes de la llegada de
los romanos se conocen con el nombre de prerromanos. Agrandes rasgos se
distinguen tres grupos, los pueblos del área mediterránea o íberos, los que
ocupan el centro peninsular o celtíberos y los instalados en el norte y
noroeste o celtas.
Tartesos :Civilización muy brillante que se
desarrolló en el suroeste peninsular en la primera mitad del primer milenio
a.C. Rodeada aún de misterio. Textos griegos y bíblicos hablan de una
civilización muy rica. Se han encontrado restos importantes como el Tesoro de
Carambolo. De cualquier manera, se piensa Tartesos tuvo un
importante comercio que benefició a una poderosa aristocracia. A mediados del
primer milenio, Tartesos se derrumbó. ¿Por la acción militar de los
cartagineses? ¿Por problemas internos?
Los Íberos(Indigetes, Turdetanos…): son los
pueblos más influidos por las colonizaciones externas, se localizan en el Este
y en el Sur desde el Pirineo catalán hasta el Algarve portugués. Son pueblos
urbanos y mercantiles (a veces organizados en confederaciones de
ciudades-estado) y dedicados a la agricultura, la ganadería y el comercio.
Producen un arte muy refinado (Dama de Elche)
Los celtíberos (Carpetanos, Lusitanos…): Se sitúan en el Centro y Oeste
peninsular. La influencia de los colonizadores es muy débil. En el aspecto
artístico, destaca la cultura de los verracos entre los vetones del valle del
Tajo. Los verracos son grandes esculturas de animales ligadas a cultos
ganaderos. El más célebre ejemplo son los Toros de
Guisando.
Los Celtas:Galaicos, astures, cátabros, várdulos, vascones.... se
asentaron desde Galicia al Pirineo aragonés.Pueblos muy atrasados, tenían una
economía basada en la ganadería, la recolección y la pesca. El peso de la
agricultura era escaso.Como restos arqueológicos, destacan los castros,
poblados de viviendas circulares construidos por los galaicos. Un buen ejemplo
es el Castro de
Coaña.
Las Colonizaciones Históricas:
A partir del siglo IX a.C. tienen lugar diversas colonizaciones.
Aparecen en las costas mediterráneas los fenicios, griegos y cartagineses,
buscando metales en los que la Península Ibérica era rica (oro, plata, cobre,
hierro y estaño), pero también se interesaron por la sal y productos de pesca,
fundando colonias cercanas al mar (puertos). Dentro de su legado destacan: la
introducción de nuevos cultivos como el olivo y el esparto, el torno del
alfarero, la acuñación de monedas o el alfabeto (fenicio y griego). La colonización fenicia: fue
exclusivamente comercial, procedía de Fenicia (actual Líbano) y establecieron
factorías comerciales destacando: Gades (Cádiz), Sexi (Almuñecar) y Malaka (Málaga).
Después llegaron los griegos que
fundaron Rhodas y Emporion (Rosas y Ampurias) en la costa de la actual Girona y
Denia. Se piensa que los griegos introducen el cultivo de la vid y el olivo. Colonización cartaginesa proveniente
del Norte de África (actual Túnez), fundaron Carthago Nova (Cartagena),
conquistarán todo el Sur peninsular y se enfrentarán a los romanos, tomando
como base sus colonias peninsulares (Guerras Púnicas).
2. Los primeros núcleos de
resistencia cristianos en la Edad Media.
Tras la rápida conquista musulmana de la mayor parte de la
península, en las montañas del norte se comenzaron a organizar núcleos de resistencia cristianos. Hasta el
siglo X, estos núcleos simplemente resisten u ocupan zonas despobladas como el
norte de la cuenca del Duero. La hegemonía en ese período está en manos de
Al-Andalus.
El núcleo asturiano: el
reino astur-leonés.
En el 722, un noble visigodo, Pelayo, y los indígenas astures derrotan en
Covadonga a un ejército expedicionario musulmán. A partir de ese momento comienza
a organizarse el reino de Asturias.
Alfonso I (739-757) asume la herencia visigoda. Establece el "Fuero
Juzgo" y otros elementos políticos. La emigración hacia el norte de
población visigodo hispanorromana (mozárabes- población más culta) refuerza
esta continuidad.
Alfonso II (791-842) establece la capital en Oviedo. Durante su
reinado se descubre la tumba del Santiago, origen de la gran peregrinación.
Alfonso III (866-910) lleva la frontera hasta la línea del río Duero,
ocupando la cuenca norte ("tierra de nadie"). Se escriben varias
crónicas que refuerzan la idea de la continuidad del reino astur-leonés y el
reino visigodo. A su muerte se traslada la capital a León.
Castilla fue la peligrosa frontera SE: el
reino de León, para defender esta frontera: se alía con rebeldes muladíes del
Ebro y fortifica Castilla, hacia el 850
Rodrigo primer conde Castilla, en IX y X repobladores
cantabros y vascos que forman comunidades de campesinos-guerreros y se rigen
por costumbres antiguas (jueces castilla), no por ley de León ni el Fuero
Juzgo, más libertad lleva a particularismo castellano. El conde Fernán González (927-970) concentra
poder, sus sucesores casi independientes.
El núcleo navarro:
La zona pirenaica occidental se hallaba entre el estado franco
y Al-Andalus.
Tras diversos acontecimientos (Batalla de Roncesvalles
contra los francos en el
778) se impuso en el que se denominó reino de Pamplona la
dinastía Íñiga.
El núcleo navarro llegó a su apogeo con Sancho III el Mayor. Rey de Navarra entre los años 1000-1035,
extendió su poder a Aragón y Castilla. Fue el monarca más poderoso de los
reinos cristianos de la Península Ibérica en el s.XI.
El núcleo aragonés:
Zonas de débil poblamiento en el Pirineo central. Bajo la
influencia primero de los carolingios, después de los navarros. Escasos avances
en la reconquista ante el potente núcleo musulmán en torno al valle del Ebro. A
principios S. X, cierta autonomía, entra en zona influencia Navarra. Matrimonio
hija del conde de Aragón con rey de Navarra, vinculación de ambos tras 970.
El núcleo catalán:
En la zona
del norte de la actual Cataluña, el reino franco carolingio estableció la Marca
Hispánica. Organizado en condados, pronto el Condado de Barcelona predominó
sobre los demás. Vifredo el Velloso
reconquistó algunos territorios. Ya en el siglo
X, los sucesores de Vifredo el Velloso dejaron
de prestar el homenaje feudal debido al monarca francés. El condado de
Barcelona pasó a ser un ente político independiente
3. La crisis del siglo XI. Reinos
Taifas e imperios norteafricanos.
La muerte de Almanzor en 1002, tras sufrir una derrota en
Calatañazor, abrió en Al-Andalus una larga etapa de fragmentación y disputa
(fitna). En menos de
30 años 9 califas se sucedieron en el trono, finalmente el
califato de Córdoba terminó por desaparecer en el año 1031. En su lugar surgió un mosaico de
pequeños reinos, llamados de taifas expresión que significa “banderías”.
De forma paulatina las taifas o banderías de Almería,
Murcia, Alpuente, Arcos,
Badajoz, Carmona, Denia, Granada, Huelva, Morón, Toledo,
Tortosa,
Valencia y Zaragoza fueron independizándose del poder
central de Córdoba.
En un principio el Califato se fragmentó en 27 taifas. Los más débiles fueron
desapareciendo y fueron anexionados por los más poderosos.
Estos pequeños reinos, mucho más débiles que el Califato, se
mostraron sumisos hacia los dirigentes cristianos, a los que entregaban unos
tributos llamados parias. Mientras tanto, el avance de la reconquista cristiana
culminó con la conquista de Toledo en el 1085. Fue una etapa de esplendor
cultural y decadencia política.
PRIMEROS REINOS DE TAIFAS, 1031-1090:
La debilidad del Al-Andalus fragmentado en los reinos de
Taifas permitió a los reinos cristianos del norte tomar la iniciativa militar en la península. Esta
superioridad cristiana se vio dos veces interrumpida por la irrupción en
Al-Andalus de dos invasiones norteafricanas que consiguieron de forma efímera
recuperar la unidad de la España musulmana.
La pérdida de Toledo en el año 1085 fue un duro golpe para
los musulmanes de Al Andalus. La reacción fue llamar en su ayuda al poder que
se había hecho fuerte al otro lado del estrecho de Gibraltar: el imperio
almorávide.
UNIFICACIÓN ALMORÁVIDE Y SEGUNDOS REINOS DE TAIFAS 1090-1145
En el año 1086 llegaron los
almorávides, agrupación de tribus
beréberes dedicadas a la ganadería, que poco antes habían creado un imperio en
el norte de África. Caracterizados por el rigor religioso, los almorávides
acabaron con los taifas, unificaron el poder político en Al-Ándalus y lograron
contener el avance de los cristianos hacia el sur. Sus éxitos militares más
importantes fueron las batallas de Sagrajas (1086) y de Uclés (1108).
El poder almorávide fue efímero. A mediados del siglo
XII la unidad de AlAndalus se vino abajo
y la fragmentación política trajo los conocidos como
Segundos Reinos de Taifas.
UNIFICACIÓN ALMOHADE Y TERCEROS REINOS DE TAIFAS 1146-1232
Los almohades, habían constituido unos años antes en el
Magreb un nuevo imperio, también formado por beréberes. No solo unificaron
nuevamente Al-
Ándalus, sino que hicieron frente a los cristianos logrando
algunos éxitos notables, como el obtenido en Alarcos (1195) contra Alfonso VIII
de Castilla.
Vinieron sin ser llamados para controlar el imperio
almorávide, no tuvieron apoyo de la población, se basaron en la fuerza militar.
También en este período se construyeron algunos edificios emblemáticos de la
España musulmana como la Giralda de Sevilla.
Sin embargo, el intento almohade de reunificación de
Al-Andalus también fracasó. El momento clave fue la aplastante derrota sufrida
ante los cristianos en las Navas de
Tolosa (1212). El hundimiento del imperio almohade llevó de nuevo a la
fitna. Las nuevas taifas no puedieron resistir el avance cristiano que resultó
prácticamente incontenible. La España musulmana quedó reducida al reino nazarí de Granada (1238-1492).
4. Las rutas atlánticas. Castellanos
y portugueses. Las Islas Canarias.
Desde el siglo XIII se estaba produciendo una lenta
pero inexorable mutación geográfica desde el Mediterráneo hacia el Atlántico,
debido a numerosos factores, tanto políticos como económicos y tecnológicos.
La fachada marítima de Portugal y la costa atlántica
de Andalucía ocupaban, desde ese punto de vista, una posición estratégica de
primera magnitud. En el transcurso del siglo XV la Corona de Castilla, que
había puesto los pies en las islas Canarias al comenzar dicha centuria, fue
protagonista de una notable expansión por la costa occidental de África, ya
fuera para explotar sus pesquerías o para realizar un lucrativo comercio.
En esas actividades participaban, sin duda, los
grandes linajes de la nobleza de Andalucía, como los Guzmán o los Ponce de
León, a los que, además de señores de tierra adentro, se les consideraba como
señores de la mar. Pero, sobre todo, había en la costa atlántica de Andalucía
un abigarrado mundo de mareantes y de pescadores.
Hacia finales del siglo XIII o probablemente
antes debieron
realizarse los primeros viajes a las islas Canarias, organizados por
comerciantes, haciéndose más frecuentes a lo largo de la centuria siguiente.
Estos viajes hicieron que las Canarias fueran bien conocidas en la segunda
mitad del siglo XIV.
La conquista del Archipiélago Canario duró cerca de un siglo, desde 1402 hasta1496. Varios factores
fueron la causa de que se alargara tanto, como la falta de medios económicos por parte de los conquistadores, la fuerte resistencia que ofrecieron algunas islas y también
que las islas no eran tan
ricas como muchos europeos
suponían y ante esta evidencia bajaba mucho el afán descubridor.
Puede dividirse en dos fases la conquista de
Canarias, una primera parte realizada porJean Bethencourt (normando al servicio de la corona
castellana), quien, a partir de 1402, somete a las islas de Lanzarote,
Fuerteventura y El Hierro, posiblemente también La Gomera, y una segunda bajo el reinado de los Reyes
Católicos, con la conquista de Gran Canaria, La Palma y Tenerife.
No tiene por ello nada de extraño que fuera
precisamente en ese territorio en donde, años más tarde, encontrara Cristóbal
Colón tanto el aliento como las bases materiales para llevar a cabo su proyecto
de viaje a las Indias cruzando el Atlántico.
Por su parte, los portugueses avanzaron de forma decisiva en la
exploración y la toma de enclaves comerciales en las costas africanas y el
Atlántico. Los archipiélagos de las Azores y
la isla de Madeira son ejemplos de esta expansión que
finalmente llevaría a fines del siglo XV a las expediciones de Bartolomé Diaz, que dio la vuelta al Cabo de Buena
Esperanza, y de Vasco
de Gama, quien finalmente conseguirá llegar a la India costeando
el continente africano.
5. La conquista del Reino Nazarí y la
incorporación del Reino de Navarra.
Los restos de Isabel y Fernando
que reposan en la capilla real de la catedral de Granada, son símbolo y
testimonio de la capital
importancia que tuvo la guerra
y la conquista de Granada en el reinado de los Reyes Católicos.
Son múltiples los aspectos que nos muestran la importancia de esta guerra para
el reinado de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón.
En lo que se refiere al reino de Castilla, la
conquista de Granada ratificó
la victoria de Isabel y
Fernando en el conflicto de
sucesión y aseguró su
posición frente a la nobleza, a la que consiguieron hacer participar de forma
masiva en la guerra. La guerra de Granada fue clave para desarrollar el sistema fiscal y la capacidad militar
castellana y significó un momento clave en la forja del estado castellano
moderno.
Por otro lado, la guerra de
Granada fue una contienda en la que participaron, militar y financieramente,
aunque de manera desigual, castellanos
y aragoneses, constituyendo la primera gran empresa común de la nueva
monarquía.
En la política internacional, la
conquista del último reducto político de Al-Andalus significó asegurar el
flanco mediterráneo de la Monarquía ante el empuje turco que en 1480 había atacado Otranto, en
el sur de Italia; asimismo, la toma de Granada dejó a los Reyes Católicos las
manos libres para encarar con fuerza los otros frentes de su política exterior,
especialmente su rivalidad con Francia en el Rosellón, Italia y Navarra.
Finalmente, la guerra y la
conquista de Granada —hábilmente explotada por los propagandistas de la corona—
sirvió para reforzar el
prestigio de los nuevos monarcas. Así, en 1486, en pleno desarrollo de las
operaciones militares, Rodrigo Ponce de León, marqués de Cádiz, hacía pública
una profecía anónima que aseveraba que Fernando conquistaría no sólo Granada,
sino también Africa hasta Etiopía, Jerusalén, Roma, las tierras de los
turcos... hasta constituir un imperio universal.
La guerra,
iniciada en 1482, estuvo marcada por el poderío
militar cristiano y por las desavenencias internas en el reino musulmán.
Tuvo sus principales momentos en las conquistas de Ronda (1485) y Málaga
(1486). El sitio final de la ciudad de Granada, de abril de 1491 a enero de
1492, culminó con la rendición final de Boabdil, el último
monarca del último reino musulmán de la Península Ibérica.
El reino de Navarra había
oscilado durante la Baja Edad Media entre la influencia francesa, la más
predominante, y las ambiciones de las coronas aragonesa y castellana. A partir
de 1451, la guerra civil entre dos facciones nobiliarias: los agramonteses y los beaumonteses o beamonteses agravó la debilidad de
un reino que había sido duramente golpeado por la crisis económica y las
epidemias.
Fernando de
Aragón, el Rey
Católico, intensificó sus injerencias en Navarra apoyándose en el bando
beamontés pese a que este bando había sido derrotado en la guerra civil
navarra. Los agramonteses buscaron el apoyo de Francia y esto
fue considerado por Fernando el Católico con un acto hostil.
La invasión tuvo lugar en 1512. Pese a la
resistencia de la facción navarra aliada a Francia, la anexión se consolidó. En
1513, las Cortes de Navarra, convocadas en Pamplona, sólo con la asistencia de
beamonteses, nombraron a Fernando el Católico rey de Navarra. El 7 de julio de
1515 las Cortes de Castilla en Burgos anexionaron el Reino de Navarra al de
Castilla. El nuevo rey se comprometió a respetar los fueros del reino y así fue durante siglos: a
pesar de su anexión a la corona de Castilla, Navarra conservó su propio
ordenamiento jurídico, sus instituciones y su autonomía.
6. Gobierno y administración de
América.
Instituciones de gobierno
(organización político-administrativa).
-En España (Castilla):
*Casa de Contratación (Sevilla):
primer organismo de gobierno, creada en 1503, con sede en Sevilla, sus
funciones eran: controlar todo el tráfico de productos con América, actuar como
tribunal mercantil o funcionar como escuela náutica para la formación de
pilotos.
*Consejo de Indias: creado en el primer cuarto del siglo
XVI, como organismo supremo de gobierno americano. Proponía el nombramiento de
cargos civiles y eclesiásticos, la elaboración de las leyes-Leyes de Indias- y
era tribunal de apelación para pleitos.
-En América : (Las
colonias, evolucionaron con el tiempo):
*La más antigua fue la
gobernación ,
se encargaba de ella a los jefes de las expediciones conquistadoras, es la
primera administración de las colonias americanas.
*Audiencias: la más antigua es la de Santo Domingo. Con
función judicial y funcionarios, va adquiriendo las funciones de los
gobernadores.
*Virreinatos: (Virreyes):
Destaca el de Nueva España-1535-, (México) y el de Perú (1543), atribuciones
plenas de gobierno en lo civil y en lo militar, presiden las audiencias, por lo
que hacían cumplir las leyes y tenían bajo su autoridad a los gobernadores de
las circunscripciones en que estaba dividido cada virreinato.
*Cuando terminaba cada alto
funcionario su mandato se hacia un juicio de residencia, para analizar
su mandato.
*Las encomiendas:
sistema de explotación agropecuaria que abastecía los mercados locales. Cada
español que participaba en la conquista y colonización tenía derecho a la
propiedad y patronato (encomienda) sobre un grupo de indios que trabajasen las
tierras, a cambio les daba alojamiento y los evangelizaba: abusos que llevaban
a veces a la esclavitud -encomiendas vitalicias, luego se convierten en
encomiendas de tributos.
*La escasez de mano de obra fomentó
la difusión de las estancias, grandes explotaciones
de ganadería extensiva.
*Para la
explotación minera (minas de plata y oro), se basó en el trabajo obligatorio de
los indios, aprovechando la institución de la mita, servicio en las minas por
turno periódico
TEMA: La monarquía hispánica de
Felipe II. La unidad Ibérica.
Felipe II fue hijo del emperador Carlos V y de
Isabel de Portugal. Desde muy joven fue preparado para desempeñar su cargo de
rey.
Tras la abdicación de Carlos I en 1556 gobernó el imperio integrado por
los reinos y territorios de Castilla, Aragón, Navarra, el Franco-Condado, los
Países Bajos, Sicilia, Cerdeña, Milán, Nápoles, Orán, Túnez, toda la América descubierta y
Filipinas. A estos vastos
territorios se le unió Portugal y su imperio afroasiático en 1580. Con Felipe II
(1556-1598) la hegemonía española llega a su apogeo.
Carlos I
había cedido en su abdicación a su hermano Fernando el Imperio Alemán y las
posesiones de los Habsburgo en Austria. En adelante, dos ramas
de la misma dinastía gobernarán en Madrid y Viena.
Tras viajar por Italia, los Países Bajos. Felipe II se asentó en la nueva capital, Madrid, desde donde
gobernó con plena dedicación su enorme imperio. A diferencia de lo que ocurrió
con su padre Carlos I, con Felipe II el centro de gravedad del Imperio se
asentó en la península, especialmente en Castilla.
Los principales problemas internos del reinado de Felipe II fueron la muerte en
1568 del príncipe heredero Carlos, que había sido arrestado debido a sus
contactos con los miembros de una presunta conjura sucesoria promovida por
parte de la nobleza contra Felipe y la poderosa figura de su secretario Antonio
Pérez, quien finalmente fue destituido y acusado de corrupción. Huyó del país y
se convirtió en un activo propagandista contra Felipe II. Apoyado por los
enemigos exteriores del rey, fue un elemento clave en la formación de la "Leyenda Negra".
Sus sucesivos matrimonios fueron parte importante de su política exterior. Se
casó por con María de Portugal en 1543 y, tras su muerte, con María I Tudor, reina de Inglaterra, en
1554. La pronta muerte de la reina que trajo de volver al catolicismo en la
isla, llevó a que Felipe se casara con la francesa Isabel de Valois en 1559. Al
quedarse nuevamente viudo y sin herederos varones, se casó por cuarta vez, en
1570, con su sobrina Ana de Austria, madre del sucesor al trono español, Felipe III.
La idea de la unidad religiosa marcó la política de Felipe II. No dudó en
intervenir ante la amenaza de las incursiones berberiscas y turcas en las
costas mediterráneas. Felipe II obtuvo una gran victoria, aunque no la
definitiva, en la batalla de Lepanto en 1571. En el interior peninsular el
monarca reprimió duramente las sublevaciones moriscas como, por ejemplo, en las
Alpujarras granadinas.
En Europa se enfrentó con Francia por el control de Italia (Nápoles y el
Milanesado). La paz en Cateau-Cambrésis en 1559 fue favorable a los intereses
españoles en la península italiana.
Tras la muerte de su esposa María Tudor, las relaciones se hicieron cada vez
más hostiles con Inglaterra, que apoyaba a los rebeldes protestantes en los
Países Bajos. El intento de invadir la isla en 1588 con la Armada
Invencible acabó
con un gran fracaso que inició el declive del poder naval español en el
Atlántico.
Felipe II no pudo acabar tampoco con el conflicto político (mayor
autonomía) y religioso (revuelta calvinista) generado en los Países
Bajos. Ninguno de los sucesivos gobernadores pudieron impedir que la rebelión
se asentara y llevara finalmente en el siglo XVII a la independencia de las Provincias Unidas (actuales Países Bajos)
Uno de sus mayores triunfos fue conseguir la unidad ibérica con la anexión de Portugal y sus dominios, al
hacer valer sus derechos sucesorios en 1581 en las Cortes de Tomar, tras morir
sin descendencia el rey portugués Sebastián.
La Unidad Ibérica:
En
1578 moría el rey Sebastián I
de Portugal en la batalla de
Alcazarquivir. El rey carecía de descendencia y varios candidatos aspiraban al
trono que detentaba la dinastía Avis.
Felipe II, rey de España ytío del fallecido y descendiente
directo del rey Manuel I de Portugal por línea directa, reclamó sus
derechos al trono.
Parte
importante de la nobleza y los grandes comerciantes portugueses favorecía la
pretensión española. La unión
ibérica podía traer
importantes beneficios políticos y económicos. Las clases populares
portuguesas, sin embargo, no veían con buenos ojos la anexión a España.
Finalmente,
Felipe II decidió la invasión de Portugal que encargó al Duque de Alba. Las
tropas castellanas llegaron a Lisboa sin encontrar apenas resistencia.
Finalmente
las Cortes portuguesas reunidas en Tomar proclamaron rey a Felipe II en1581.
El que sería conocido como Felipe
I de Portugal permaneció tres
años en Lisboa.
Para
conseguir la anexión,
Felipe se comprometió a mantener y respetar los fueros, costumbres y
privilegios de los portugueses. También se comprometió a mantener en sus cargos
a todos los funcionarios de la administración central y local. También se
comprometió a mantener a todos los efectivos de las guarniciones y armadas que
controlaban el imperio portugués.
Se
creó un Consejo de Portugal y se suprimieron las aduanas con
Castilla.
La
anexión significó la unión de
dos enormes imperios. Las posesiones portuguesas en Brasil, África y Asia
pasaron al Imperio de Felipe
II. Un imperio “en donde nunca se ponía el sol”.
COMENTARIO DE TEXTO:
1. Resumen:
- La
Justicia en el Antiguo Régimen en España (rey como legislador y juez).
- Estudio de
Santos Coronas.
- La
Administración de Justicia desde los Reyes Católicos a Felipe II: Audiencias y
Chancillerías, la importancia del Consejo Real, la Pragmática de Felipe II, los
alcaldes mayores y los adelantamientos, el corregidor.
2. Ideas
fundamentales del texto:
- El origen
del derecho Español de la época de los Austrias: “el rey como legislador y
juez”: Alfonso X y “El Espéculo, Fuero Real y Las Partidas”.
- La
organización de la administración de Justicia dentro del sistema polisinodial:
Chancillerías, Audiencias, el Consejo Real, el Gobernador, Alcaldes Mayores,
las Audiencias de los adelantamientos, el corregidor y los alcaldes. Mencionando
la Pragmática de Felipe II.
- ¿Podemos decir
que la “Justicia del Antiguo Régimen en Castilla” es clara o confusa?
3. El
modelo político de los Austrias :
Los Habsburgo o Austrias continuaron y desarrollaron la
organización política heredada de los Reyes Católicos. Procuraron rodearse de letrados, funcionarios
expertos en leyes que no pertenecía a la alta nobleza. De esta manera,
apartaron a la aristocracia del poder de la Corte, permitiendo que el poder
político quedara centralizado en las manos de los monarcas.
La alta
nobleza siguió jugando un papel muy importante, detentaba los altos
cargos del ejército, de la marina y de la diplomacia, pero siempre
subordinada a la corona.
Castilla se convirtió en el centro del Imperio.
Esto ocurrió en mayor medida con Felipe II que con su padre, Carlos V. En los
demás reinos y posesiones se establecieron Virreyes (Aragón, Indias,
Italia) o Gobernadores (Países Bajos, Milán). Estos cargos
fueron ejercidos por altos nobles o miembros de la familia real.
El Rey
estaba asesorado por los Consejos (sistema polisinodial). Estos podían ser
sectoriales (Hacienda…) o territoriales (Castilla,
Aragón, Indias, Italia…). Estaban formados por letrados, nobles y alto clero y
tenían un carácter meramente consultivo. El Rey tenía la
última palabra.
Carlos V y Felipe II despacharon los asuntos cotidianamente con consejeros de
su máxima confianza, los Secretarios, que hacían de
intermediarios entre el rey y los Consejos. Algunos, como Antonio Pérez con
Felipe II, alcanzaron una gran influencia.
La
administración territorial mantuvo la estructura heredada de los Reyes
Católicos. LosCorregidores, designados por
la corona, tenían el control de las ciudades. Otros cargos de la burocracia
eran los Contadores y recaudadores de impuestos, y los Alguaciles que hacían
funciones de policía.
Las Chancillerías y las Audiencias se encargaron de la administración de
justicia.
En 1561,
Felipe II fijó la capital en Madrid. Diversos factores explican esta
decisión: La situación central de la ciudad en la península o las ventajas
ambientales (agua, caza…). Esta decisión provocó el rápido crecimiento de la
Villa y Corte, a la vez que la decadencia de ciudades como Valladolid o Toledo,
que eran anteriormente frecuentemente la sede de la Corte.
FUENTE HISTÓRICA:
- Tema: Llegada de los españoles a las Indias (América) en la época
de la Conquista.
* Ideas de
las que hay que hablar:
-
Descubrimiento de América, enfrentamiento con los portugueses y Tratado de
Tordesillas y sus consecuencias. Otros documentos reguladores de la Conquista.
- ¿Por qué
siguen los castellanos la ruta del Oeste y los portugueses la ruta del
Atlántico Sur?
- Resultados
de la ruta de los castellanos y portugueses por el Atlántico.
- Causas de
la conquista de América.
PEDRO LÓPEZ ARNEDO (Profesor de Historia de España. IES Margarita Salas de
Majadahonda).