EL COMENTARIO DE
TEXTO HISTÓRICO:
DEFINICIÓN DE TEXTO
HISTÓRICO:
Un texto histórico es cualquier documento escrito que
nos permite obtener un conocimiento más completo, diversificado y significativo
de la Historia. El comentario de textos históricos es la técnica que nos
permite extraer información sobre un determinado periodo, acontecimiento o
hecho concreto. Un comentario de un texto histórico no es una simple
improvisación, se necesita una preparación, unos conocimientos sobre el tema y
un método, para segundo de bachillerato nos harán dos preguntas:
1. Explique razonadamente el
tipo de texto y resuma las ideas fundamentales del mismo. (Puntuación máxima:
1,5 puntos).
2. Responda a la siguiente
cuestión. (Puntuación máxima: 3 puntos)- relacionada con el contenido del texto
a comentar en el ejercicio o exámen-:
. El análisis debe hacerse, pues, de forma sistemática,
anotando desde la primera lectura las ideas fundamentales. Para ello es útil
(en una segunda lectura) el subrayado y la numeración de las líneas o de los
párrafos del texto en el margen.
CLASIFICACIÓN DE UN
TEXTO HISTÓRICO (PARA SABER EL TIPO DE TEXTO):
- Políticos: Discursos, tratados, declaraciones,
acuerdos, manifiestos, informes, crónicas, panfletos...
- Histórico-literarios: Memorias, artículos de
prensa, expresión de experiencias personales (relatos de viajes, narraciones,
ensayos, cartas...)
- Histórico-circunstanciales: hacen referencia a
hechos, acontecimientos, situaciones aisladas o concretas...
- Histórico-jurídicos: Constituciones, leyes,
tratados, disposiciones, normas, decretos, tratados internacionales...
- Económicos: se refieren, normalmente, a actividades
productivas que pueden estar expresadas en normas, gráficos y estadísticas
comentadas, actas de comercio, relaciones económicas diversas...
- Sociales: aluden a la familia, individuos, grupos,
vida cotidiana, clases, estructuras y conductas sociales, censos, informes...
- Culturales: textos que recogen y hacen referencia a
las distintas formas del pensamiento, arte, etc.
- Historiográficos: son textos y fragmentos elegidos
de la obra elaborada por un historiador, posterior a los hechos.
EJEMPLOS DE TIPOS DE
TEXTOS:
Político:
DISCURSO DE MANUEL AZAÑA SOBRE EL ARTÍCULO 26 DE LA
CONSTITUCIÓN
“( … ) Me refiero a esto que llaman problema religioso. La
premisa de este problema, hoy político, la formulo yo de esta manera: España ha
dejado de ser católica. El problema político consiguiente es organizar el
Estado en forma tal que quede adecuado a esta fase nueva e histórica el pueblo
español.
Yo no puedo admitir, Sres. Diputados, que a esto se le llame
problema religioso. El auténtico problema religioso no puede exceder de los
límites de la conciencia personal, porque es en la conciencia personal donde se
formula y se responde la pregunta sobre el misterio de nuestro destino. Este es
un problema político, de constitución del Estado (…), porque nuestro Estado,
(…) excluye toda preocupación ultraterrena y todo cuidado de la fidelidad, y
quita a la Iglesia aquel famoso brazo secular que tantos y tan grandes
servicios le prestó. Se trata simplemente de organizar el Estado español con
sujeción a las premisas que acabo de establecer.
Durante muchos siglos, la actividad especulativa del
pensamiento europeo se hizo dentro del Cristianismo, el cual tomó para sí el
pensamiento del mundo antiguo y lo adaptó con más o menos fidelidad y
congruencia a la fe cristiana; pero también desde hace siglos el más o menos
fidelidad y congruencia a la fe cristiana; pero también desde hace siglos el pensamiento
y la actividad especulativa de Europa han dejado, por lo menos, de ser
católicos; todo el movimiento superior de la civilización se hace en contra
suya (…)
España era católica en el siglo XVJ, a pesar de que aquí había
muchos y muy importantes disidentes, algunos de los cuales son gloria y
esplendor de la literatura castellana, y España ha dejado de ser católica, a
pesar de que existan ahora muchos millones de españoles católicos, creyentes”.
Manuel Azaña. Ministro de la Guerra. Sesión de Cortes. 13 de
octubre de 1931.
Histórico-Literario:
Artículo de prensa:
“Gijón,JavierNEIRA
José Antonio Montero tiene 96 años, vive en Gijón y es quizá el único superviviente asturiano de cuantos participaron en la División Azul, el grupo de combatientes españoles que durante la II Guerra Mundial fue hasta la Unión Soviética para luchar contra el comunismo desde el bando de la Alemania nazi. Hijo de un ferroviario muy religioso, como él, con numerosísima prole; telegrafista de profesión y padre, a su vez, de una amplia familia, fue herido cuatro veces -dos de ellas de extrema gravedad- mantiene una memoria y una vitalidad prodigiosas y habla de sucesos terribles con una objetividad y humanidad dignas del mayor elogio.
Montero nació en noviembre de 1913 «en Pajares del Puerto» en una familia con quince hijos. Era el séptimo, solo queda él. La madre «muy luchadora», hija de un labrador rico y al tiempo, capataz de peones camineros. De La Frecha, la aldea de Juanín Muñiz Zapico, el líder de CC OO en la transición; «se querían mucho las dos familias». Renfe daba casa y terrenos para sembrar así que tenían vacas, gallinas, conejos...
El padre, de Puente de los Fierros. De críos, José Antonio y sus hermanos iban en tren desde Campomanes, donde vivían, al colegio de los maristas en Pola de Lena. Padre ferroviario, billete gratuito. «Buena leche, abundante mantequilla, comida sana, rosario diario y en casa a las nueve de la noche» así resume la infancia donde, quizá, se labró el secreto de su longevidad.
El padre, capataz de vías y obras, ascendió a sobrestante -encargado de cuidar vías y túneles- y se fueron todos a Oviedo donde José Antonio estudió «delineante, con don Francisco, en la escuela industrial que estaba cerca del Fontán».
Vivían al lado de los Pilares en unos chalet de la Renfe. Iba con sus hermanos a la Acción Católica de San Juan. «Parchís, damas, santo rosario y para casa».
Pero todo se torció. «A nosotros nos llamaban cavernícolas y nosotros a ellos, comunistas. A la salida de San Juan nos esperaban para darnos palos. A puñetazos nos defendíamos pero tenían unas porras hechas de cables y con una bola de plomo. Corríamos como demonios mientras nos daban. Ya en casa nuestra madre venga a curarnos».
En la revolución de octubre del 34 cayó una bomba en la casa familiar que le alcanzó. Acabó en un sanatorio donde le sacaron un puñado de trozos de metralla. Y estalló la guerra civil. «Nuestros padres nos reunieron. Estoy cansada de curaros, dijo nuestra madre. No hacéis nada malo y esos sinvergüenzas os pegan. Creo que José Antonio» fundador de Falange «es un hombre muy bueno».
Fue con dos hermanos al cuartel del Millán. Se alistó en la compañía del capitán Janáriz, «una persona excelente». Cayó herido en la posición de Pando, cerca de Fitoria, donde, entonces, había un túnel de la Renfe. «Ellos tenían fusiles checos, me salvó el casco»…
José Antonio Montero tiene 96 años, vive en Gijón y es quizá el único superviviente asturiano de cuantos participaron en la División Azul, el grupo de combatientes españoles que durante la II Guerra Mundial fue hasta la Unión Soviética para luchar contra el comunismo desde el bando de la Alemania nazi. Hijo de un ferroviario muy religioso, como él, con numerosísima prole; telegrafista de profesión y padre, a su vez, de una amplia familia, fue herido cuatro veces -dos de ellas de extrema gravedad- mantiene una memoria y una vitalidad prodigiosas y habla de sucesos terribles con una objetividad y humanidad dignas del mayor elogio.
Montero nació en noviembre de 1913 «en Pajares del Puerto» en una familia con quince hijos. Era el séptimo, solo queda él. La madre «muy luchadora», hija de un labrador rico y al tiempo, capataz de peones camineros. De La Frecha, la aldea de Juanín Muñiz Zapico, el líder de CC OO en la transición; «se querían mucho las dos familias». Renfe daba casa y terrenos para sembrar así que tenían vacas, gallinas, conejos...
El padre, de Puente de los Fierros. De críos, José Antonio y sus hermanos iban en tren desde Campomanes, donde vivían, al colegio de los maristas en Pola de Lena. Padre ferroviario, billete gratuito. «Buena leche, abundante mantequilla, comida sana, rosario diario y en casa a las nueve de la noche» así resume la infancia donde, quizá, se labró el secreto de su longevidad.
El padre, capataz de vías y obras, ascendió a sobrestante -encargado de cuidar vías y túneles- y se fueron todos a Oviedo donde José Antonio estudió «delineante, con don Francisco, en la escuela industrial que estaba cerca del Fontán».
Vivían al lado de los Pilares en unos chalet de la Renfe. Iba con sus hermanos a la Acción Católica de San Juan. «Parchís, damas, santo rosario y para casa».
Pero todo se torció. «A nosotros nos llamaban cavernícolas y nosotros a ellos, comunistas. A la salida de San Juan nos esperaban para darnos palos. A puñetazos nos defendíamos pero tenían unas porras hechas de cables y con una bola de plomo. Corríamos como demonios mientras nos daban. Ya en casa nuestra madre venga a curarnos».
En la revolución de octubre del 34 cayó una bomba en la casa familiar que le alcanzó. Acabó en un sanatorio donde le sacaron un puñado de trozos de metralla. Y estalló la guerra civil. «Nuestros padres nos reunieron. Estoy cansada de curaros, dijo nuestra madre. No hacéis nada malo y esos sinvergüenzas os pegan. Creo que José Antonio» fundador de Falange «es un hombre muy bueno».
Fue con dos hermanos al cuartel del Millán. Se alistó en la compañía del capitán Janáriz, «una persona excelente». Cayó herido en la posición de Pando, cerca de Fitoria, donde, entonces, había un túnel de la Renfe. «Ellos tenían fusiles checos, me salvó el casco»…
Histórico-circunstancial:
“La Guerra de la Independencia contra los
franceses (1808-1814) se produce en un momento de crisis política: a la
debilidad del monarca español, Carlos IV, se suma la ambición de su hijo
Fernando y la del primer ministro, Godoy. Hijo de la revolución francesa, el
autoproclamado emperador Napoleón aprovechó esta crisis para entrar con su
ejército en territorio español con el pretexto de invadir Portugal, que se
había negado a secundar el bloqueo contra Inglaterra, siendo su intención
extender el proyecto revolucionario a toda Europa, incluyendo España.
Cuando en enero de 1808 se produce la entrada
de tropas francesas en España no existe ninguna sospecha de agresión, ya que
todos están convencidos de las buenas intenciones del aliado. Los partidarios
del príncipe Fernando se amotinan en Aranjuez en el mes de marzo y consiguen la
destitución de Godoy y la abdicación de Carlos IV. En Madrid es asaltado el
palacio del Almirantazgo, donde vive Godoy, y Fernando entra triunfalmente en
la capital donde es aclamado como nuevo rey. Por poco tiempo: en abril, padre e
hijo, convocados por Napoleón en Bayona, son obligados a abdicar. El hermano
del emperador francés, José, se encargaría de reinar en España.
Esta decisión marcaría el inicio de la
desconfianza y de la decepción del pueblo español hacia el hasta entonces amigo
Napoleón. En Madrid ya se vive el malestar por la convivencia con las tropas
francesas al mando del general Murat, que el primero de mayo es abucheado en la
Puerta del Sol. Murat comunica a la Junta de Regencia constituida la obligación
de trasladar a Bayona al resto de la familia real, la Junta se niega, Murat
insiste, la tensión aumenta …”
Histórico-Jurídico:
“TÍTULO PRELIMINAR
(Constitución de 1978)
Artículo 1
1. España se constituye en
un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores
de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el
pluralismo político.
2. La soberanía nacional
reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado.
3. La forma política del
Estado español es la Monarquía parlamentaria.
Artículo 2
La Constitución se fundamenta
en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de
todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las
nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas.
Artículo 3
1. El castellano es la
lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de
conocerla y el derecho a usarla.
2. Las demás lenguas
españolas serán también oficiales en las respectivas Comunidades Autónomas de
acuerdo con sus Estatutos.
3. La riqueza de las
distintas modalidades lingüísticas de España es un patrimonio cultural que será
objeto de especial respeto y protección.
Artículo 4
1. La bandera de España
está formada por tres franjas horizontales, roja, amarilla y roja, siendo la
amarilla de doble anchura que cada una de las rojas.
2. Los Estatutos podrán
reconocer banderas y enseñas propias de las Comunidades Autónomas. Estas se
utilizarán junto a la bandera de España en sus edificios públicos y en sus
actos oficiales.”
Económico:
“Desde 1925 la economía americana había crecido de una forma
continua, los beneficios de la bolsa eran enormes. Después de varios años de
crecimiento espectacular sobreviene bruscamente una crisis en la bolsa de Nueva
York, las acciones de las empresas caen en picado pues todo el mundo quiere vender
para recuperar algo de lo que tenía invertido. La causa de todo esto es el
crecimiento artificial de la bolsa que no se ajusta a la realidad económica y
hace de la especulación una norma. Ese desajuste entre el estado real de la
economía y el de la bolsa hace que ésta explote en 1929 reduciendo a la nada el
valor de la acciones y produciéndose la quiebra de las empresas al no disponer
de capitales, esto genera paro, inflación...
De Estados Unidos la
crisis pasa a Europa donde había invertido mucho capital norteamericano y que
ante la crisis se retira de Europa, ésta, y sobre todo Alemania y
Austria principalmente, al quedar descapitalizadas, son
arrastradas a la crisis.”
Social:
“Por regla
general y hasta la aparición de la televisión, la familia española solía
reunirse en torno a la radio. Las ocasiones eran varias: la hora de la comida,
cuando todo el mundo se mantenía atento al "parte" (noticiero), y la
de la cena, también marcada por las noticias del día. Pero el momento favorito para
oír la radio eran las horas de la tarde, cuando los niños habían vuelto ya del
colegio y se disponían a merendar.
En aquellos años, las costumbres españolas respecto al horario de comidas imponían un desayuno que se fue haciendo cada vez más "esquemático", excepto domingos y días festivos. Este desayuno consistía por, lo general en una taza o tazón de café con leche o chocolate (cacao) y algún bollo, pan tostado con mantequilla o aceite de oliva o galletas. Luego, a media mañana en los centros de trabajo y colegios se hacía un almuerzo: la hora del bocadillo o del café. Este tentempié era en realidad un segundo desayuno. Entre la una de la tarde y las dos, la comida fuerte del día. Esta comida solía juntar a casi todos los miembros de la familia en torno a la mesa.
Volviendo a la tarde y con la merienda (pan con chocolate o bocadillo de embutido) también llegaba la hora de los cuentos en la radio, algunos de los cuales se hicieron tan famosos como el del "Gallo Kirico" y versiones más o menos simplificadas de la Bella Durmiente, Blancanieves, etc., que pequeños y grandes oían con atención…”
En aquellos años, las costumbres españolas respecto al horario de comidas imponían un desayuno que se fue haciendo cada vez más "esquemático", excepto domingos y días festivos. Este desayuno consistía por, lo general en una taza o tazón de café con leche o chocolate (cacao) y algún bollo, pan tostado con mantequilla o aceite de oliva o galletas. Luego, a media mañana en los centros de trabajo y colegios se hacía un almuerzo: la hora del bocadillo o del café. Este tentempié era en realidad un segundo desayuno. Entre la una de la tarde y las dos, la comida fuerte del día. Esta comida solía juntar a casi todos los miembros de la familia en torno a la mesa.
Volviendo a la tarde y con la merienda (pan con chocolate o bocadillo de embutido) también llegaba la hora de los cuentos en la radio, algunos de los cuales se hicieron tan famosos como el del "Gallo Kirico" y versiones más o menos simplificadas de la Bella Durmiente, Blancanieves, etc., que pequeños y grandes oían con atención…”
Cultural:
“No deja de ser llamativo que dos de los discípulos más cercanos a
Ortega, José Gaos y Julián Marías, al preguntarse por la relación entre las dos
actividades que más peso tuvieron en la biografía del maestro, la filosófica y
la política, lleguen a conclusiones diametralmente opuestas. Para el primero,
la política sería como una especie de “falsa” vocación en Ortega, significando
“falso” que sólo se daría la vocación en fase de “tentativa”. Eso explicaría
que Ortega estuviera entrando y saliendo de la política continuamente: “El
filósofo como tal, sólo podría tener la vocación de la política práctica, de la
actuación política, como tentación y tentativa —de que desistiría a cada
decepción, aunque, atenuada cada una por el tiempo (...) para volver a caer en
la tentación” [1]. La tentación sería entonces la forma de
la relación de Ortega con la política, algo, por tanto, externo a su fondo
personal y que le llegaría de la circunstancia, y en lucha permanente con su
ocupación central, la teoría.
Por contra, Marías defiende una cierta armonía entre teoría y
política: “En Ortega conviven dos vocaciones bien definidas: la vocación
teórica y la vocación política. Que ésta sea también teórica en la inmensa
mayoría de los casos, que en todos ellos esté condicionada por su condición de
filósofo y hombre de teoría —es decir, por un espíritu de veracidad— no debe
oscurecer ni mitigar el profundo interés prestado por Ortega a los temas
políticos”
Historiográfico:
PRIMERA
PARTE. DESDE LOS GREMIOS
HASTA
EL SIGLO XX.
1.
La vida de los gremios.
“En los escasos trabajos que existen en
España relativos a nuestro objeto, se presenta el siglo XIV como época de gran
desarrollo del gremio, en la que se desenvuelven las antiguas corporaciones y nacen
muchas nuevas; y esa época la caracterizan los autores por la intervención del
Estado en la existencia corporativa, ampliando la reglamentación, no sólo a la
industria en general, sino también a la vida interna del gremio, publicándose
nuevas ordenanzas y siendo confirmadas o reformadas las antiguas. En el siglo
XIV Barcelona alcanzó un movimiento industrial y mercantil que seguramente no
tuvo igual en toda España. Eran innumerables los oficios que en ella se
cultivaban, y de ellos la mayor parte formaban corporación, con autorizada
existencia desde el siglo XIII, llegando en el XIV a tenerla 45 gremios, de los
cuales lograron sus primeros estatutos los de plateros en 1301, guanteros en
1310; zurradores, pergamineros y curtidores, en 1311; albañiles, en 1379;
arneseros, en 1390, y caldereros en 13952.”
.
MANUEL TUÑÓN DE LARA : “Historia del
Movimiento Obrero español”.
PEDRO LÓPEZ ARNEDO (PROFESOR DE HIES DEL IES MARGARITA SALAS)